Telefónica abona el próximo día 8 de Noviembre un dividendo de 0.65 euros por acción. En estos momentos, la cotización se encuentra en niveles que podemos considerar importantes.
La influencia de la parte baja del canal alcista y el soporte entorno a los 19.00 euros, invitan a pensar que el precio debería encontrar apoyo en dicha zona.
Recordemos que tras el pago de dividendo, los citados 19.00 euros pasarán a ser, aplicando la corrección, 18.35 euros.
Aunque parezca lógico y probable dicho apoyo en el precio, existen otros factores que nos hacen ser más prudentes a la hora de determinar el sesgo alcista en el precio.
Si observamos el indicador RSI, éste muestra ciertas divergencias bajistas con respecto a la evolución del valor.
En las últimas sesiones, el precio ha continuado marcando máximos y mínimos relativos crecientes. Sin embargo, si pasamos a valorar la evolución del indicador RSI, vemos como los últimos máximos del preciograma no han supuesto nuevos máximos relativos en dicho indicador. Esto nos indica una divergencia con respecto a la evolución real del preciograma.
A groso modo, el indicador RSI muestra la fuerza del precio mediante la comparación de los movimientos individuales al alza o a la baja de los sucesivos precios de cierre.
Luego, se trata de una herramienta que permite contrastar y dar mayor validez a un análisis, como otros tantos indicadores, y que en ocasiones nos marca una evolución adelantada del devenir del precio. Siempre sin perder de vista el desarrollo posterior de la cotización, que es la que verderamente refleja la realidad día a día y el cambio de compra y venta aplicado en nuestras operaciones.
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