Año Cero DC

Como continuación de mi artículo Retorno a la Edad Oscura ahora que ya somos conscientes de la que nos hemos/han metido, en este artículo pretendo atisbar cómo cambiarán las relaciones económicas y sociales y qué impacto tendrá la actual crisis provocada por el Covid-19.

Como el artículo va a ser intenso, conviene dotarle de la banda sonora adecuada. Para ello, nada mejor que las Gnosiennes nº 1, 2 y 3 de Erik Satié que podéis escuchar en este vídeo:

Bien, ahora que ya estamos en situación con esta banda sonora, pongámonos manos a la obra.

Economía: Los Primeros Destellos Oscuros

Esta semana hemos tenido los primeros datos después del inicio de la crisis, y lo cierto es que hay un poco de todo.

Por un lado, los primeros datos de empleo que han salido confirman lo que ya sospechábamos: que esto es mucho peor de lo que pensábamos.

Así, por poner algunos ejemplos, en España hemos batido récords en caída de afiliación a la Seguridad Social y aumento del paro en un mes. Y esto sin contar los parados de facto que están inmersos en los ERTEs y todavía no han sido contabilizados pero que muy probablemente pasen a engrosar las listas de desempleados en los próximos meses.

 

Y el número de empresas que han cerrado este mes de marzo también en récord histórico. En total han cerrado 122.000, situando el número de empresas activas en niveles cercanos a los de la crisis, ligeramente por encima de 1,3 millones.

 

 
En EEUU, las peticiones semanales de desempleo en niveles nunca imaginados, situándose en más de 6 millones esta semana (junto con los más de 3 millones de la semana pasada nos metemos en 10 millones de estadounidenses apuntándose al paro):

 

Y los Non Farm Payrolls que se han publicado hoy en -700.000, cerca de los niveles de la crisis de 2008.

 

Podríamos seguir sacando más y más gráficos de otros países con un aspecto similar pero creo que la idea está clara: la contracción de la demanda va a ser brutal en los próximos meses.

Bien, veamos cómo están las cosas por el lado de la oferta. ¿Cómo perciben los empresarios el futuro más inmediato? Si analizamos los diferentes PMIs que han salido esta semana podemos ver que hay resultados bastante dispares: así, los PMIs de Manufacturas y de Servicios de las principales economías europeas pintan bastante mal, sobre todo en el caso del sector servicios: todos los valores absolutamente en niveles de fuerte contracción.
 

 

Sin embargo en el caso de China, la remontada a un mes vista parece anticipar que lo de Wuhan casi no ha sucedido, aunque claro con los datos chinos, nunca se sabe:

 Lo que sí me ha resultado sorprendente es el ISM manufacturero de EEUU: prácticamente no ha bajado comparado con el de otras economías, situándose en 52.5:

 
¿Dónde está el truco en el caso de EEUU? Si analizamos por partidas ese ISM nos encontramos que todas las partidas de ese ISM han empeorado a excepción de una, la de Entregas de Proveedores que sube a 62.1 desde 52.4, indicando que las entregas se han acelerado y que en breve existirán problemas de abastecimiento. La subida temporal de este componente es lo que ha amortiguado en buena medida las importantes caídas del Empleo (47.0 vs 55.6 del mes anterior), Variaciones de Inventarios (41.5 vs 53.9) o Importaciones (40.2 vs 52.6), por cuanto representa la quinta parte del índice. Muy probablemente el próximo ISM no sea tan benévolo con las previsiones económicas, sobre todo si tenemos en cuenta el ritmo al que está avanzando el coronavirus en EEUU.

Asimismo en las últimas semanas han salido las previsiones económicas revisadas de varios bancos. En los siguientes gráficos pueden ver por ejemplo las de Deutsche Bank, pero todas apuntan en la misma dirección: caídas del PIB superiores al 10% en EEUU y al 20% en la Eurozona en el segundo trimestre, aunque luego se prevé una fuerte recuperación. No obstante, en mi opinión creo que recuperarse de un shock tan fuerte tanto por el lado de la oferta como de la demanda y además amplificado por el efecto globalización no va a ser tan sencillo. Además en esas estimaciones se está considerando un escenario ideal en el que la pandemia no resurge en ningún país de nuevo desapareciendo por completo en verano (algo deseable pero para nada seguro).  

 

 

Bancos Centrales: No es Oro Todo lo que Reluce

Todos los bancos centrales del mundo han optado por amortiguar las más que posibles fricciones del sistema financiero inyectando liquidez a mansalva. Su actuación podría resumirse en la frase “lo compramos todo”. O como en algunos medios lo han acuñado, estamos en el QEternity.

En el siguiente cuadro elaborado por Goldman Sachs podéis ver las principales medidas de política monetaria lanzadas en el mundo:


Si analizamos el caso concreto de la Fed lo cierto es que es verdaderamente surrealista por cuanto en los últimos días ha comprado bonos del Tesoro y MBS por valor de… ¡912.000 millones de dólares!

 

Así que la balance sheet de la Reserva Federal entre compras de deuda, repos y swaps está ya en nada menos que en 6 billones de dólares, incrementándose en tan solo 3 semanas lo mismo que tardó la anterior QE3 en 15 meses. Una cantidad que por cierto representa el 7.5% del PIB estadounidense.

 

Pero que no les engañen, ya que como se suele decir el diablo está en los detalles. El apartado de compras de deuda corporativa no son para todo el mundo, ya que se exige un cierto nivel de calidad crediticia de los bonos por lo que aquellas empresas que ya tenían problemas antes de que estallara esta crisis o cuya calidad crediticia no llegue al mínimo exigido simplemente estarán condenadas a la extinción. Realmente podría pensarse que los planes están diseñados para mantener a flote a las grandes corporaciones americanas.  

Con respecto a las medidas de estímulo fiscal, pueden encontrar un resumen de las más importantes  a nivel mundial en el siguiente cuadro por cortesía de Goldman Sachs:

 

No obstante, al igual que en el caso anterior, muchas de las medidas anunciadas tanto por los bancos centrales como por los gobiernos no están destinadas a rescatar empresas realmente sino a proteger a los bancos por cuanto se avalan los préstamos de las empresas que no pagan o que directamente estén en riesgo de quiebra.

Resumiendo: tanto los bancos centrales como los gobiernos han adoptado medidas de contención, claramente necesarias por otro lado, pero que de ninguna manera resuelven el principal problema de constricción simultánea de la oferta y la demanda que plantea la actual crisis sanitaria.

Oro: El Mercado Está Roto

Y hablando del oro: no sé si se habrán fijado esta semana en las elevadas horquillas del Oro ofrecidos por los brokers retail de Forex y CFDs. Si no me falla la memoria he llegado a ver 30 y hasta 50 dólares de horquilla en momentos puntuales. ¿La razón? Se ha producido un enorme desfase entre el precio del oro físico y el precio del oro cotizado en los mercados financieros, debido a que la pandemia del Covid-19 ha causado el cierre de varias refinerías de oro,  produciendo escasez de oro físico en los mercados.

 

De momento esta es la explicación “oficial” pero intuyo que detrás de esta historia del oro puede que haya más cosas, porque no es normal que los futuros sobre Oro descuenten una prima extra más allá de los costes de transporte y almacenamiento; porque sí señores… ¡tenemos el Oro en backwardation! (cuando generalmente está en contango). Una posible explicación sería que el mercado ya descuenta una Reserva Federal poniendo tipos de interés en negativo, ojo con esto.

Petróleo: Primeros Caídos en Combate

Como ya anticipaba en mi anterior artículo, mientras se resuelve la guerra de precios entre Rusia y Arabia Saudí, han empezado a caer algunas empresas de shale oil. La primera en acogerse al capítulo 11 de bancarrotas en EEUU ha sido Whiting Petroleum a la par que vemos como se empiezan a evaporar un buen número de plataformas petroleras en EEUU:

 

Por este motivo no es de extrañar que Trump esté mediando en la guerra de precios y trate de salvar los muebles: no debemos olvidar que muchas de estas empresas dedicadas a la extracción de petróleo están financiadas por los bancos, imagínense si el petróleo se mantuviera por debajo de 30 dólares durante muchos meses y empezasen a producirse impagos. Lo más probable es que tras la reunión de la OPEP+ que tendrá lugar en breve, intenten llevarse el West Texas por encima de ese nivel para poder mantener a flote estas instalaciones y no agrave la de ya de por sí complicada situación de la economía estadounidense.

Aunque sigue habiendo un problema: incluso con un petróleo barato… ¿quién va a comprarlo con un mundo completamente parado? Lo que en otra situación habría sido una bendición para muchos sectores como el de las aerolíneas, hoy es algo verdaderamente dramático.

Sociedad y Trabajo: Hombre vs Economía

No quisiera terminar este artículo sin comentar brevemente algunos aspectos que me están llamando poderosamente la atención en estos días y que podrían cambiar radicalmente nuestras relaciones sociales y la forma de entender el trabajo en los meses posteriores a esta crisis:

  • Empieza a recuperarse el término gig economy, el cual define una situación laboral en la que somos contratados puntualmente para realizar trabajos esporádicos en los que aportaremos nuestras habilidades. Esta visión implica la desaparición del concepto actual de trabajador fijo asalariado que cotiza a la Seguridad Social que goza de la protección del Estado proporcionando sanidad y cobertura en caso de desempleo. Mucho cuidado porque estamos bordeando una situación límite que, de mantenerse en el tiempo, podría llevar al desmantelamiento del Estado de Bienestar actual entrando en un juego completamente distinto y muy poco agradable.
  • Se está generando una cultura de la “desocialización” que a corto plazo, podría perjudicar más si cabe a todos aquellos negocios que dependen de reunir a grandes cantidades de personas (restaurantes, gimnasios, centros comerciales, hoteles, cines, etc). Recordemos que en España el turismo y la hostelería son sectores clave para nuestra economía, si la gente sale con miedo a la calle, la recuperación de esos sectores será muy costosa, dejando además muchos “cadáveres” empresariales por el camino.
  • Pagaremos asimismo un elevado precio, cediendo nuestra privacidad a los Estados. Con la excusa de vigilar a los individuos para prevenir una posible pandemia cederemos toda nuestra información a las autoridades a cambio de que nos protejan de la propagación de enfermedades. Algo que por otro lado no es nada nuevo: en China tenemos el sistema de puntuación social.

 

  • Por último, no debemos olvidar que el impacto sostenido de la crisis llevará a muchas familias a quedarse sin ingresos y sin comida, lo que provocará el inicio de disturbios y el aumento de la delincuencia. Podría pensarse que estoy exagerando y que estoy muy distópico pero lo cierto es que esta semana hemos podido ver algunos episodios de este tipo en el sur de Italia:

Conclusión

Tras escribir este artículo debo reconocer que se me queda peor cuerpo que cuando escribí el anterior analizando la crisis actual. Me encantaría pensar que estamos en manos de sabios gobernantes a nivel mundial que sabrán resolver la situación con medidas audaces e inteligentes pero a la vista de como se está gestionando el problema ahora mismo, tengo muchas dudas de que realmente vaya a ser así. Para remate estamos ante la peor situación actual que ha vivido la Humanidad desde la II Guerra Mundial, pero con el agravante de que la solución es realmente compleja por la cantidad de variables afectadas de forma simultánea.

En todo caso, mis mejores deseos a todos nuestros lectores y a sus familiares y allegados en esta crisis. Si mantenemos la unidad y nos ayudamos entre todos podremos salir adelante, de lo contrario el abismo como pueden ver es muy profundo.

Un abrazo (y mucho ánimo),
X-Trader

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