¿Es Posible Especular de Otra Forma? II

PARTE II: LOS PILARES DEL SISTEMA
Ya hemos dicho que lo que pretendemos es operar en el largo plazo. Analizando los aspectos más importantes de la operativa a corto y a largo, podemos concluir que la operativa a corto presenta muchos más inconvenientes. Así que aunque ganarle al mercado ya es difícil per se, vamos a intentar hacerlo en el plazo menos difícil. Sin duda, eso es en el largo plazo. Ahora “sólo” nos falta diseñar nuestro sistema.

Todos somos conscientes de la importancia de la psicología en la Bolsa. Muchas veces hablamos en el foro sobre la importancia del control emocional, la lucha entre el miedo y la avaricia, la disciplina, la sangre fría… Pero eso es sólo una parte. La psicología de masas, como todos sabemos, juega un papel fundamental en la Bolsa.

Como dicen los estudiosos del Behavioural Finance y los inversores contrarios en general, el mercado siempre exagera los acontecimientos. Este comportamiento irracional del mercado ante determinadas circunstancias es lo que provoca que la Bolsa sea totalmente ineficiente a corto plazo. Esas ineficiencias son las que debemos aprovechar.

Por otro lado, otro comportamiento psicológico muy habitual en los mercados es el de la proyección. Los inversores tienden a proyectar hacia el futuro el comportamiento pasado. A la gente le gusta comprar valores que han subido porque piensan que esos valores tan alcistas hoy lo seguirán siendo mañana. Al contrario, cuanto más baja un valor menos inversores quieren comprarlo ya que proyectan hacia el futuro las bajadas recientes. Hace poco tiempo decía Warren Buffet que el inversor medio invierte mirando por el retrovisor, más que por el parabrisas. Como buen abuelete, el señor Buffet es tremendamente gráfico.

También es aplicable este fenómenos a la inversión en fondos. Los inversores prefieren aquellos con las mayores rentabilidades en los últimos 3-5 años. Sin embargo, las estadísticas nos demuestran que precisamente esos fondos son los que peor se suelen comportar durante el periodo siguiente. No recuerdo quien dijo que la Bolsa era el único negocio del mundo que atraía a más compradores cuanto más caros fueran los productos vendidos. Real como la vida misma.

El gráfico inferior muestra el comportamiento de los 35 peores valores del NYSE frente al comportamiento de los 35 mejores valores (hablando en términos de retorno). Los datos abarcan el periodo desde 1933 a 1978 y cada año se seleccionan las que más han subido el año anterior y las que más han bajado, configurando así cada cartera. Vemos cómo aquellos inversores que se dejaron llevar por la proyección, perdieron dinero. Los últimos serán los primeros también en los mercados financieros. Todos conocemos la estrategia de los perros del Dow (Dogs of the Dow) que es algo muy parecido a esto.

 

Es decir, una cartera formada por los 35 peores valores del NYSE del año anterior produciría un retorno del 30% en un periodo de 45 años; mientras que una cartera formada por los 35 mejores valores del NYSE del año anterior, produciría una pérdida ligeramente superior al 10% en el mismo periodo. No hace falta remontarse tan atrás. Todos conocemos el caso de Terra. Fijaros en Sogecable: todo lo que subió en el año 2003 y cómo se comportó en el 2004 y en lo que llevamos de 2005. Veremos qué pasa con las inmobiliarias (por no mentar Google).

Conclusiones
Tras haber decidido romper con la propaganda del sistema y empezar a operar a largo plazo, nos hemos fijado en determinados patrones psicológicos muy habituales en las Bolsas durante todos los periodos: la exageración y la proyección. Son dos principios propios de la naturaleza humana. No se trata de parámetros optimizados ni de indicadores “mágicos” que hoy funcionan y mañana no. Sino que son comportamientos eminentemente humanos que mientras las Bolsas sigan siendo Bolsas perdurarán en el tiempo.

Debido a esa presencia presumiblemente eterna de los patrones psicológicos, nuestro sistema de especulación ha de ser diseñado de tal forma que los pueda aprovechar. Por tanto, la base del sistema será:

  • Operar en el largo plazo, ya que representa un plazo temporal con más opciones de batir al mercado para el inversor medio.
  • Buscar exageraciones de la masa que hacen de la Bolsa, en el corto plazo, un mercado totalmente ineficiente. Como a largo plazo el mercado tiende a la eficiencia, al operar en contra de la exageración nos estaremos colocando en una posición de clara ventaja.
  • Aprovecharnos de la proyección. Como hemos visto, las peores acciones de una año tienden a comportarse mejor al año siguiente, y viceversa.

Por tanto, debemos buscar ineficiencias entre los peores valores de la Bolsa para obtener posiciones de privilegio que nos reporten buenos retornos a largo plazo. Nuestro sistema deberá satisfacer esta premisa.

Un saludo y mucha suerte
Quinito

 

(Continuará…)

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