Continuamos con la serie sobre venta de opciones. Hasta el momento hemos visto cómo pensar en el valor de las opciones que estamos negociando. Aprendimos acerca de la prima de riesgo y sobre cómo determinar si realmente algo ES caro. Ahora vamos a unir todos estos conceptos, introduciendo la mentalidad que tienen los traders rentables cuando piensan en operar.
El Desafío del Trading
Una de las características del trading que lo hace tan desafiante es que en cada estrategia (ya sea rentable o no) hay mucha varianza.
A largo plazo, no es razonable que esperemos que nuestra equity sea una hermosa línea recta desde la parte inferior izquierda de la pantalla hasta la parte superior derecha. Estaría bien… pero desgraciadamente nunca va a ser así.
En su lugar, nuestro gráfico estará repleto de períodos alternantes en los que ganaremos dinero, perderemos dinero, o no pasará gran cosa.
Esta característica del trading tiene una ventaja y una desventaja:
- Ventaja: perder dinero hoy no significa que tengas una mala estrategia.
- Contra: ganar dinero hoy no significa que tengas una buena estrategia.
Veamos por ejemplo este gráfico:

Este es un gráfico de precios de una acción. Imagina que representara la evolución de toda tu cartera. Si esta fuera tu estrategia, sería horrible, ¿verdad? En sólo un mes hay casi una caída del 10%.
Pero si quitamos algo de zoom y nos alejamos un poco, mostrando más histórico…

Vaya, ¡no está nada mal! La estrategia ahora parece bastante buena (en realidad en todo momento hemos visto el gráfico del SPY ;)).
La parte difícil de todo esto es que…
En un momento dado del tiempo somos sólo un punto en esa equity.
Dependiendo de cuándo empecemos, las cosas nos pueden ir bien o mal en ese momento.
En un mundo así, ¿cómo podemos operar con confianza?
La respuesta breve es que debemos hacer hincapié en la metodología de nuestras operaciones, no sólo en el resultado de hoy.
Pensar Estratégicamente Sobre una Estrategia
«No todas las operaciones buenas son rentables. No todas las operaciones rentables son buenas.»
Incluso cuando uno se esfuerza mucho y tiene la máxima confianza en una idea, se puede perder dinero con ella. Pero eso no significa que la idea fuera mala, o que no se deban realizar operaciones similares en el futuro.
Si nuestro análisis fue tan bueno como creemos, realizar esas operaciones una y otra vez en el futuro podría ser extremadamente lucrativo, aunque haya algunas operaciones perdedoras.
Pero para poder ver más allá de una única operación, tenemos que pensar en términos del valor esperado de nuestra estrategia.
¿Qué es el Valor Esperado?
El valor esperado (también denominado esperanza matemática) es un concepto procedente del mundo de las apuestas que nos ayuda a responder a esta pregunta:
«Si realizara esta apuesta/operación una y otra vez en el futuro, ¿de media cuánto dinero ganaría o perdería?»
Es la forma en que los traders profesionales analizan sus operaciones, ya que les permite evaluar de forma rápida y sencilla si merece la pena realizar una determinada operación.
La fórmula para calcular el valor esperado (EV) de una estrategia es la siguiente:
EV = (PW · W) – (PL · L)
Es decir, EV es la probabilidad de que ganes (PW) multiplicada por la cantidad que ganas en caso de acertar (W), menos la probabilidad de que pierdas (PL) multiplicada por cuánto estás arriesgando en la apuesta (L).
Nuestro objetivo será siempre tomar operaciones que tengan un valor esperado positivo. Un valor esperado positivo nos dice que una operación, en promedio, vamos a obtener rentabilidad positiva. Y si seguimos haciendo esa apuesta una y otra vez en el futuro, la rentabilidad media por operación (rentabilidad total dividida por el total de apuestas realizadas) debería coincidir con nuestro valor esperado.
¿Cómo Afecta a Nuestras Operaciones Tener un Valor Esperado Positivo?
Tener valor esperado positivo es similar a jugar con una moneda trucada que tiene un 51% de posibilidades de que salga cara. Si sólo lanzamos la moneda una vez, la probabilidad de acertar será del 49%/51%. Pero cuantas más veces lancemos la moneda, más probabilidades tendremos de que salga cara, hasta el punto de que si lanzas la moneda miles de veces, habrá un gran sesgo hacia el número de veces que sale cara.
Veamos algunos ejemplos prácticos para entender mejor esto.
Ejemplo 1. Valor esperado en un casino
Supongamos que somos el crupier en una mesa de blackjack. Cada vez que alguien juega, apuesta 10 dólares. Si gana la casa, se lleva los 10$, y si gana el jugador, obtiene 10$ de beneficio. En el blackjack, el casino tiene un 1% de ventaja sobre el jugador, o un 51% de posibilidades de ganar. Entonces, ¿cuál es el valor esperado? Hagamos números y averigüémoslo aplicando la fórmula anterior:
EV = (0.51 x 10) – (0.49 x 10) = 0.20$
Como podemos ver, el casino gana una media de 20 centavos por apuesta realizada en la mesa.
De este modo, aunque a corto plazo apostar en el casino la probabilidad de ganar o perder es más o menos 50/50, a la larga parece que todo el mundo pierde dinero… excepto el casino.
Este es el valor esperado en acción. Y para ayudar a que se materialice dicho valor, el casino controla el tamaño de la apuesta (no te deja apostar grandes cantidades como para saltar la banca), y tienen muchos juegos al mismo tiempo para aumentar la frecuencia de las apuestas.
Veamos otro ejemplo para ver cómo funciona el valor esperado en el mundo real.
Ejemplo 2. Lanzamiento de una moneda
En este ejemplo vamos a hacer una simulación de varias personas que lanzan una moneda trucada, de tal forma que la moneda tiene un 51% de posibilidades de que salga cara y un 49% de que salga cruz. Los participantes apuestan 10$ por lanzamiento de moneda, y la relación riesgo/recompensa es de 1 a 1 (arriesgar 10 para ganar 10).
Veamos qué ocurre. La primera persona lanza la moneda 10 veces y obtiene la siguiente curva de beneficios. Como podemos ver, no está nada mal el resultado.

Con este resultado, ¿podemos ejecutar ya la estrategia? ¡No tan rápido! Mirad lo que pasa cuando 10 personas lanzan la moneda 10 veces.

Ahora cada jugador tiene una línea de color diferente. Como podemos ver, algunas personas ganan dinero, pero otras pierden dinero tras los diez lanzamientos. Parece bastante aleatorio. ¡Tal vez el valor esperado no sirve para nada! Para averiguarlo definitivamente, vamos a aumentar el número de veces que estas 10 personas lanzan la moneda a 10.000.

¡Vaya! ¡Si realizamos 10.000 lanzamientos de esta moneda, 9 de cada 10 personas obtienen un rendimiento espectacular! Tan solo una persona perdió algo de dinero.
Veamos qué pasa si realizamos 100.000 lanzamientos.

¡Impresionante! Tras 100.000 lanzamientos TODOS los que jugaron a este juego se hicieron ricos.
Así que como podemos ver… Una pequeña ventaja. ¡TAN SOLO UN UNO POR CIENTO! Fue suficiente para hacerse rico.
No necesitamos hacer un home run todos los días para ganar dinero como traders. Sólo necesitamos una pequeña ventaja que nos dé ese valor esperado positivo.
Eso sí, obviamente, saber que tienes una ventaja y ser capaz de cuantificarla realmente es bastante más complicado. Por el momento, simplemente lo que debemos hacer es empezar a pensar de esta manera.
Vinculando el Valor Esperado con Algunas Estrategias Básicas de Opciones
Cuando observamos el mercado, ¿cuál cree que debería ser el valor esperado de una operación si operásemos a ciegas?
Si el mercado fuera perfectamente eficiente, ¡el valor esperado debería ser 0!
El mercado no está del lado de un equipo o de otro. No trata intrínsecamente de dar ventaja a nadie. Si el mercado fuera perfectamente eficiente, nadie ganaría dinero comprando ni vendiendo.
¿Por qué es importante esto?
Recuerde lo siguiente: el valor esperado de su estrategia tiene en cuenta la probabilidad de ganar/perder y la relación riesgo/recompensa de la operación.
Así que, cuando nos fijamos en una operación realizada al azar que tiene una alta probabilidad de ganancia, ¿qué debería decirnos eso acerca del riesgo? Si tenemos un 90% de posibilidades de ganar, y el mercado trata de producir que la apuesta tenga un valor esperado de 0… ¡Eso significa que nuestro riesgo tiene que ser mucho mayor que nuestra recompensa! Eche un vistazo a esto:
EV = (0.90 x 10) – (0.10 x 90) = 0$
Lo contrario sucede con estrategias con bajas probabilidades de ganancia: en ese caso, la recompensa deberá ser mucho mayor que el riesgo para hacer que el valor esperado sea cero.
Tenga todo esto en cuenta cuando busque operaciones.
Con todo lo que hemos aprendido hasta aquí, piense ahora en esto:
¿Es la venta de strangles (cunas) 0DTE con Delta 20 en SPY una forma fácil de ganar dinero? ¿Quién está dando la contrapartida comprando estos strangles? ¿Qué pasa si el SPY se mueve con fuerza?
De acuerdo con la fórmula del valor esperado, el riesgo debería ser mayor que la recompensa. Lo que da lugar a dichos como «recoger céntimos delante de una apisonadora.»
¿Es Realmente un Valor Esperado de 0 una Base de Referencia en Opciones?
La respuesta corta es no.
La razón es que las opciones son productos convexos (si se compra una opción y la acción se mueve como la espuma, el beneficio es enorme), y los vendedores asumen riesgos muy elevados. Si el valor esperado fuera 0, nadie querría vender, y el comprador de opciones podría obtener una cobertura gratuita en su cartera. Así pues, existe un valor esperado ligeramente positivo para el vendedor con el fin de incentivarle a estar ahí.
¿A cuánto asciende el valor esperado para los vendedores de opciones? Por término medio, un 11% anual. Se trata de la Prima de Riesgo de Varianza que vimos en la primera entrega, esto es, la prima que se paga a los vendedores de opciones por proporcionar acceso a los beneficios de los grandes movimientos.
Conclusión
Si tenemos el valor esperado de nuestro lado, por lo general ganaremos dinero. Y así es como debemos ver el trading. Cualquier operación individual tiene un gran componente de suerte, pero siempre que tengamos una ventaja en cada operación que realicemos, acabaremos obteniendo beneficios a medida que realicemos más y más operaciones.
Es muy importante entender esto porque, a corto plazo, puede ser muy difícil saber si vamos a seguir ganando si no conocemos nuestro valor esperado. Es extremadamente peligroso jugar sin pensar en el valor esperado, porque si no lo tienes de tu lado, nada más importa.
Incluso puede que seas increíblemente bueno gestionando el riesgo, pero da igual, seguirás desangrándote lentamente con el tiempo. Eso es lo que hace que los traders perdedores vuelvan al mercado, porque no se pierde siempre en cada operación. Lo que sí ocurre es que pierdes más de lo que ganas.
Pero cuando tienes el valor esperado de tu lado, te estás preparando para toda una vida de éxitos. Un casino gana partidas, pierde partidas, pero no se estresa. Incluso el que reparte las cartas en el blackjack podría estar borracho, y daría igual. Siguen ganando dinero y saben exactamente cómo funciona el valor esperado de ese sistema.
Si podemos hacer eso en nuestro trading, podremos encontrar ideas de trading rentables y construir estrategias para explotarlas.
(Continuará…)
Saludos,
X-Trader